La gestión de la repatriación de restos mortales

La gestión de la repatriación de restos mortales

La pérdida de un ser querido es un desafío emocional abrumador, más aún si ocurre en un país extranjero. La repatriación de restos mortales no es sólo una cuestión de logística, sino también un proceso cargado de trámites burocráticos y decisiones difíciles. Este artículo ofrece una guía detallada para navegar por este proceso, proporcionando un punto de partida a aquellos que enfrentan a esta difícil situación.

  1. Primeros pasos en el extranjero

El proceso comienza con el contacto inmediato al consulado del país de origen del fallecido y para facilitar el proceso, es recomendable contar con una funeraria especializada en traslados internacionales. Estos profesionales ofrecen asistencia crucial, desde orientación legal hasta apoyo emocional. Obtener el certificado de defunción, la autorización judicial en caso de investigación por la causa de la muerte, la solicitud de traslado, el certificado médico de embalsamamiento o el certificado de cremación son algunos documentos relevantes en el primer paso administrativo.

  1. Decidiendo entre inhumación o cremación

Los familiares deben decidir si el cuerpo será repatriado para su inhumación o si optarán por la cremación en el país donde ocurrió el fallecimiento. Esta decisión afecta los trámites subsiguientes, incluyendo la obtención de un certificado de cremación si se elige esta última opción.

  1. Trámites administrativos

La repatriación requiere una serie de autorizaciones consulares y el cumplimiento de las normativas sanitarias para el transporte de restos. Estos trámites aseguran que el proceso se realice de acuerdo con las leyes internacionales y nacionales.

  1. La logística del traslado

Seleccionar una empresa de servicios funerarios especializada en repatriación es crucial. Ellos se encargarán de la preparación del cuerpo, la elección del ataúd apropiado y la coordinación del transporte ya sea aéreo o terrestre.

  1. Procedimientos al llegar al país de origen

Una vez en el país de origen, los restos pasan con seguridad por trámites aduanales. Posteriormente, la familia recibe los restos para proceder con los rituales funerarios deseados.

  1. Apoyo continuo para la familia

El proceso no termina con la llegada de los restos. El apoyo psicológico para los familiares es fundamental, así como la asistencia legal en casos que lo requieran.

Es vital reconocer que la repatriación de restos mortales es una responsabilidad delicada y complicada. En este artículo ofrecemos un punto de partida para entender el proceso, pero enfatizamos en la necesidad de delegar en profesionales especializados en estos servicios funerarios. Ellos no solo garantizarán que los aspectos técnicos y legales sean manejados correctamente, sino que también proporcionarán apoyo y consuelo en un momento de profundo dolor y pérdida.